viernes, 31 de octubre de 2008

Una situación normal en un día normal

Entra un paciente puesto hasta las cejas un “habitual” fumando. Al verlo una compañera le dice aquí no se puede fumar. Contestación:


- Que no estoy fumando que sólo lo tengo encendido..


Ante esa situación me toi planteando poner este cartel que una vez leí en recepción:


ESTOY TRABAJANDO


Tenga la bondad de dirigirse a mi, con suavidad, sin alzar el tono de voz y contrariarme en modo alguno.

Porque, a las personas de mi edad ( pa mi lo sustituiremos por sensibilidad) los gritos y discusiones nos provocan bruscas subidas de tensión, trastornos gástricos y cardiovasculares, dolores de cabeza y escozor en el dedo gordo del pie..

Y eso podría llegar a ponerme…


¡MUY VIOLENTA!