Que duro es ser mimo

Hoy he hecho algo por primera vez, nunca había sucedido he cogido la baja. Como es habitual en mí coger como mínimo un resfriado por estación del año (en invierno caen varios).

Lo de siempre un poquito de fiebre los primeros días y el uso indiscriminado de pañuelos es lo normal. Ahora viene lo raro y es que como servidora por el trabajo que tiene hablar muuucho, no pq sea mí afición que también lo es.

Últimamente cada vez que curro y estoy resfriada me quedo afónica, ahora soy la mujer que susurra a los pacientes. Yo que en mi vida había probado eso que llaman afonía, orgullosa yo de mi capacidad pulmonar que viene de la rama materna (eso es pa verlo).

Lo mejor en estos casos son las reacciones de la gente tanto en teléfonos como en mostrador:

1. - ¡Uy! nena que te mire un médico que de eso tenéis ahí.

2. - Anda que vaya voz.

- Si es que han visto lo dulce que la tengo hoy y me han puesto en telf (supongo que será para que se diferencie de las líneas heróticas)

3. - Toma mucha miel con limón y no fuerces la voz (tan sólo es la llamada número 80 y llevo sólo dos horas)

Pos ala ahora soy como el enanito mudito escribiendo carteles como Genma Saotome el oso panda de Ramma.

Si sustituís lo que pone en japonés por "vete a la mierda" sabréis lo que más he dicho en las últimas 24 horas.