viernes, 13 de marzo de 2009

Mini historietas para no dormir Vol.3

Esto le paso a una compañera de trincheras. Recepción vacía, sólo estaba mi compañera cuando llega un transexual:

- Nena ahora ya soy como tú.

-Eing¿? ¡Ostia!

Se pone en una esquina escondiéndose un poquito sólo un poquito pa que más… De repente se levanta la falda y enseña to “el potorro”, se había operado. Después de esta exhibición evidentemente quedaban los detalles de la operación y demás comentarios. Para acabarlo de adobar para despedirse va y dice:

- Y a que no sabes lo mejor de todo… que a mis 40 años soy virgen.

1 comentarios:

Nena dijo...

Jesus que miedo!!!!
y encima se quedaría tan tranquila, xq claro, ir enseñando lo que Dios(o los medicos en este caso) te han dado, es lo más normal del mundo...

por cierto, lo del perro de objetos perdidos...esto... yo quiero oir eso.